\"No sé cuántos años pasaron
desde que te fuiste,
desde que me dejaste,
en esta asquerosa cama.
Me pregunto quién será tu próximo cliente.
¿Recuerdas mi nombre?
¿Quieres que te lo recuerde?
Buscabas mis ojos...
Y yo debajo de tus bragas,
sigilosamente apuñalaste mi corazón.
Ahora mátame,
corre lejos así no te vuelvo a ver.
La confusión invade tu cabeza,
¿qué carajos harás con el cádaver de tu cliente?
La promesa ya no existe,
mi corazón no padrá ganar esta batalla con tu cuchilla acariciándolo....
No estoy seguro de seguirte el juego,
¿qué ganaría a cambio?
No hagas promesas que no puedas cumplir.
Eres la reina de mi dolor,
no balbuceo,
sólo digo que mi sangre será tu corona.
Ahora
recuéstame, átame,
cogeme, cortáme y calma tu sed.
Eres la que baraja,
no dejes que tu mente dude,
tu cabeza no se debe llenar de confusión.
Mi cuerpo teñido de rojo es lo que quieres ver...
Lo sé,
te excita.
¡Acaba con ésto de una vez!
Mi corazón no soportará los sentimientos que habitan en tu mente...\"
Dorian.