Susurra el viento
tu nombre,
el cielo de la tarde
sueña nostálgicamente
esos besos muertos
Tus recuerdos marchitan
y llueven en
un mar de lágrimas secas,
son las hojas amarillas
de mi último libro
Rezan tus manos
un latido ciego
en mi alma,
y suplican sangre
de mis labios,
la esperanza
Sueñan las gaviotas
con un nido azul alcanzar,
sueñan mis ojos
con un día tus labios...
los volveré a besar