En la alta peña, la sombra de una silueta...
hacia el horizonte, dos luciernagas perdidas al vacío,
resuena el silbido del viento; el mar canta
y sobre la arena caen dos perlas cual rocío.
Perdida el alma, esta sufriendo sin cesar
un sueño de libertad y cuento de amor
se desvanece como agua en la mano
cual esplendor del día, suspiro de labios y rétorico furor.
Levanto los brazos al cielo; un supremo
grito deja escapar la ira callosé de rodillas
dobló la frente, convulsiono de sollozos, y al extremo
el chocar de olas, se escucha contra las rocas.
El pensamiento...un mar de confusiones,
lleva arrastrando tristezas del alma
dejando en la orilla sus canciones
de libertad, bien y de justicia; calma ya paso
la tempestad solo fueron rumores.
Como arrojase su fruto la palma
y la rosa embriaga de sus perfumes
así quiere el alma llevarse sin trama
de tu embriagante perfume, que consumes
del fruto del amor, que tu ausencia me mata.
Más triste camina ya porque se ha alejado
-¿Porqué te fuiste, si sabes que te necesito?
Me has dejado en la penumbra, me has robado
el pensamiento...
-¡Insensato! te alejaste de mí, junto a tí
te has llevado mis sueños, mis esperanzas
vuelve por el sendero que juntos enmarcamos.
¡Así que no me escuchas!. A gritos te he llamado
tristezas has dejado y ahogandome en mis penas,
vi que no estas aquí.
Caminando sin rumbo va alejandose cada vez más
sin saber de su destino que le deparará,
sin la mano amiga que hace sentir la paz,
perdida en la confusión, mientras
camina, sigue sin saber quien la parará.
La vida escapase de sus manos
se esfuma cual escencia del amanecer.
-¡Oh, Amor! Te estas alejando, tus ojos
me han mirado, expresan tu adios, sin entender
¿porque te vas?; solo se que lejos
de tí muriendo estoy.
-¡Oh,Amor!Tu me dabas calor
ppor ti protegida iba al caminar,
sin preocupación me borrabas el dolor
y hoy llena de rencor sin tu mirar.
-Fe bienechora fé,¿A dónde has ído?
abandonada dejaste al alma
llena de dudas, resonando cual silbido
del viento, moviendo la palma,
haciendo caer las esperanzas perdidos
en la senda oscura de la vida.
-Esperanza tu me alimentabas,
tu satisfacias mis locuras
de ilusiones, tu enordabas
y calmabas las ansías mías.
-Donde han ido, acaso se han marchado,
no me abandonen en mi delirio
no atormentes m{as al corazón perdido,
vosotros pódeís salvarlo cual lirio
que ha desmayado y caído rendido.
-¿Porque todos se marcharon?...
alguien quiere explicarme cual
es mi destino, acaso acabaron
destruidos los corazones que una vez enamorados
tal flores perfumadas ofrecían su olor al viajero.
Con la mirada al cielo
busca el consuelo
que acaricia su cara
enguajose las lagrimas
y con fervor exclama.
-¿Dónde quedaron aquellas noches
que me brindabas el calor
de tus manos y me consolastes
recargada en tu amor?
-Se que es tarde para reclamos
pero yo solo pido que regreses
mi corazón entero no en polvos
con sabor a olvido ni en recortes...
-No se que paso aquella noche que te marchaste,
pero en medio de una incertidumbre me dejaste,
causando el gran dolor y confusión...
De momento quedo todo en silencio
solo se volvio a escuchar el estremecer
de las palmeras y el chocar de las olas
y un suspiro que expiro.
Como si hubiese despertado
de un largo sueño, tallose los ojos
y dijo con una voz suave y tibia
como el anochecer.
-Señor gracias por permitir
nuevamente ver la realidad
de mi existir, y volver a
comprender aquella luna
que me mira con dolor y amor.
-Se que he vuelto a
renacer y dispuesta a luchar
ire, por la fe que tengo en tí.