Hoy quiero escribir un poesía
a mis animales de compañía
porque se merecen lo mejor
que pueda darles cada día.
Tres felinos y un canario
comparten cada día mi vivir,
siendo mi alegría y delirio
Lassi, Pixi, Charli y Colorín.
Lassi tiene catorce años
y es madre de los otros dos,
recelosa con los desconocidos
pero gran amante de sus hijos.
Pixi es todo cariño y bondad,
de pelo abundante gris y blanco,
muy parecido al tigre en libertad
y tan bello como el lince Ibérico.
Charli es otra cosa...
pequeñita y muy graciosa
pero también un tanto peligrosa,
pues salta a la jaula si se le antoja.
Cuando buscan mi compañía
su airoso andar aproximan
y vienen a mi encuentro
con ceremoniosa simpatía.
Pero si quieren estar solos
se marchan sin ninguna duda
con un leve quejido mimoso
que me embriaga de dulzura.
¡Y por último está Colorín
que es un canario especial!,
bellas plumas son sus alas,
su pico un canto magistral
y la cola arcoíris de filigranas.
Ellos son parte de mi familia
y el que falto de sentimientos
al leer estos versos tenga dudad,
que piense y no se confunda.
¡Por todo ello quiero dejar claro
que la verdad solamente es una,
mis animales se ganan con creces
el derecho a mi ternura!
Fina