Grietas fascinantes en un rostro bello,
luz incandescente que brilla en tinieblas
es tu belleza que ilumina el sendero.
Golpes ajenos que enmarcan el cuerpo,
memorias inevitables en el recuerdo.
y dolor que aún persuadido prefiere estar contigo.
Corre niña, corre... no dejes que te alcance
si viento que sopla no apague tu llama.
Brilla niña, brilla... no dejes que te apague
niebla que oscurecer quiere tu aura.
Espejo que proyecta la grieta y sol que la enmarca
Mira de frente no bajes la mirada.
Si tu luz no es apagada tu hermosura invisible no sea
que luz que ciega mis proyecciones... es tu belleza.