Me he encontrado prisionero
Dentro de mis propias costillas,
Algo parece venir y también irse
¿pero cómo se renuncia a toda una vida?
Vienen repetidos pájaros de aire
Que auguran ventura,
Y como el sol ya hace la epifanía
Pero aquí en el suelo todo parece triste,
Inerte, oscuro, perdido.
¿podría creer en lo que ellos dicen?
No sé si dios ya me ha abandonado
O aun no termina su lección de cicatrices
Pronto comenzara lo que se haga nuevo
Y no sé cuanto durara el recuerdo
De lo que agobia ni se que tan radiante
Será por más que los pájaros lo digan
El futuro que prometen no parece posible,
Quizás debería pensar en lo que he hecho mal
Pero me aterra el hecho del conteo de los daños,
Quizás debería dejar mi mente en paz
Dejar que los días pasen y tratar de hacerlo cambiar
A poca gota comenzar a conquistar.
Cuánto daño hacen las decisiones
No estoy del todo seguro si deba seguir creyendo
En el destino o de buena vez hacerme
Devoto de la casualidad, no lo se.
Aun no he determinado ni si quiera imaginado
Lo que ocurrirá ni tampoco su probabilidad,
Tengo las plantas de los pies desollados
Y el arenal aun pretende quemar,
Pero que mas puedo hacer si no caminar
Continuar avanzando por mas que me duela
Allá enfrente escucho algunas
noches el inmarcesible tronar del mar.