Mauro Enrique Lopez Z.

Sol y belleza de mujer .

Te llamé!... no sé cuantas veces

tú como si nada

y mis escritos aún no se si te llegaron a gustar

y yo apenado tuve que decir basta!

dejaré la puerta de mi alma abierta,

a ver si una dama pasa y con una mirada

me borré la pena y entre la alegría

sin tener que llamar y lo escrito

lo haré en esa tarde donde cae el sol

cerquita de mi casa entre gaviotas velero

y no falte una dama con su andar me hará inspirar

lo bonito de ese sol cadencente

o de la belleza de la mujer .