La poesía es esa voz
que me dicta inverosímiles verdades
que vaga por las ramas y los trinos
yace en la garganta del ahorcado
buscando atravesar las ventanas
empuja las puertas
corroe póstigos y aldabas
roza las mejillas de las muchachas tristes
las que perdieron el pudor en las tardes
de lunas arreboladas con enamorados fantasmas
la poesía se acerca a las llagas y las abre
y la sangre sagrada se derrama entre la miel
busca aromas en el cieno
besa el hocico de tiernos animales
reparte tristezas y nos deslumbra
después de eso nada es igual
el misterio nos acompaña para siempre.