TUS AMORES SON DOS FLECHAS
Tus amores son como el suave aroma
que se expande sobre el aire
de la flor enamorada.
¡Oh, amada!
tus amores son mejores
que todos los vinos que nos embriagan;
tú me embriagas de amor
y me invades el alma,
me la invades de locuras
y de mágicas palabras,
palabras que son tus flechas,
miradas que son tus lanzas
y así me dejas morir
solitario en mi cabaña,
sin que tu bebas del cáliz
los amores de mi entraña,
que tan escondidos viven
y tú que tanto los amas.
Oh, golondrina mía,
qué bellas son tus palabras,
qué mansa y cándida eres
cuando bebo de tus aguas
en la cueva de tu boca,
sin poder saciar las ansias
que tiene esta boca mía.
Y quiere verse embriagada
de los vinos de los dioses,
y beberlos con su amada,
en las sendas de cupido
y en los bosques de Diana.
¡Ven tú, oh, hermosa mía!,
entra en las sombras y ramas
en la densa nube azul,
o en la blanda nube parda
para fundir nuestras bocas,
desde el labio a la garganta
desde tus senos de leche,
hasta el cráter que los guarda.
¡Ven a mí, amiga mía!
vuelve otra vez a tus lanzas,
a la invasión de locuras
a todos los vinos que embriagan;
las sendas del fiel cupido
y las flechas de Diana.
Vuelve a la nube azul,
a la mansa nube parda
para morir en tu boca
y dormir en tu garganta;
y en el cráter de tus senos,
adosar mi dulce cara
para soñar nuestros sueños
entregando cuerpo y alma.
Ven tú, oh, paloma mía,
por la senda enamorada,
entra y dame tus amores,
tu perla negra y sagrada.
funde tus labios de luna
en estos vinos que embriagan,
para sentir esa gloria…
en los fondos de tu alma.