Miedo, no a perderte
sino a apoderarme de ti, a ser
ambientalmente irrespirable y dependiente.
Quiero perderte y saber qué es vivir si ti,
quiero tirar todo por la ventana y resetear la vida.
No quiero tenerte de vuelta conmigo, no quiero
ser de ti lo mejor que te ha pasado.
No quiero que vuelvas a arreglar las cosas
ni pretendo pedirte disculpas.
No pretendo ser idiota, ni tan idiota para perderte.
Ni tan miserable para dejarte escapar.
¡Qué sabia desición sería en estos momentos
el despojo incólume de mi alma muerta!