SONETOS NOCTURNOS

Soneto # 20 EL PAYASO TRISTE

 

 

¡Porqué insistir, mujer, cuando dijiste:

en este corazón tu amor no cabe?

¿Por qué insistir, aun cuando se sabe

que sólo en mi ilusión tu amor existe?

 

En músicas de adiós y olvidos diste

al cofre del desdén la terca llave.

Yo soy la pluma que ha perdido el ave,

yo soy la risa del payaso triste.

 

Mas como risa vaga y silenciosa

que de mis labios se desprendïera

trocará el tiempo en viento mi cariño.

 

Ya no seré yo Marcos, ni tú: Rosa

y el alma mía haráse a mi manera

y no en la forma en la que fui de niño.