Yo soy la hoja que arranco el otoño,
Esa hoja de autumnales colores
De arreboles en puestas de soles
Y de eclipses de verdad y de corazones,
Desprendida del árbol de la utopía
Por el viento mercenario
Golpeada contra piedras,
Contra la realidad y la razón
Que hacían parecer a las rocas como algodón,
Yo soy esa hoja que sobrevivió sola
Resquebrajada e incompleta las nieves
Del invierno y el infierno,
Esperando el florecer de la primavera
Y el salir del sol, esperando quizás
También al amor, bajo el abrigo blanco de nieve
Dormí y desperté…
De alguna forma resucite, vi a las flores nacer
Y todo volver a crecer, los colores
Se engalanaban y entonces lo note,
Sí, sobreviví al invierno, pero por mas primaveras
Que cruzara, las hojas arrancadas
Ya nunca vuelven a reverdecer.