Nicolas Ramos Lopez

Arcángel Terrenal...Yo soy el ángel

Arcángel Terrenal (Ella)

 

Sin avisar llegaste de confines eternos,

como Ángel te nombraste, todavía no entiendo

¿cónde están tus alas Arcángel de mis sueños?

 

Qué varonil te muestras ante mi humano cuerpo,

¿o acaso me viste en algún rincón del firmamento?

 

Cuando mi mente vaga para escapar del reto

de este mundo frágil, cuyo dolor no quiero.

 

Muéstrame las armas para llevarme lejos

para pelear mi lucha, para encontrar mi puesto,

no estoy en tierra, tampoco soy del cielo.

 

Pero tu gran poder me ha llegado dentro

donde la fémina resiste el anhelado encuentro,

dómo cortar mis alas si soy libre, soy viento,

¿será que entonces soy yo tu complemento?

 

Y llegaste justo en el mejor momento,

para conquistarme el alma y todo mi universo.

¿Con qué derecho entras al mundanal terreno?

 

Dime si descubriste que aquí no pertenezco

que soy de otro mundo vagando por lo etéreo

donde el amor existe, donde todo es perfecto.

Y la paz me embriaga en su correr sin tiempo

donde veo claramente mi arcángel, mi portento

tan superior, tan hombre, tan fuerte, tan violento

que yo mujer, humana, me envuelvo entre sus besos,

deseo que sus alas me cubran todo el cuerpo.

 

Yo soy el ángel (Él)

 

Yo soy el Ángel,

quien usurpa este cuerpo.

 

Quien trae en sus manos

tu amor y tus deseos

de confines eternos

traigo aquí en mi pecho

la pasión que pedías

en tus noches de sufrimientos.

 

Yo soy el ángel sin alas,

tu príncipe, tu lamento.

 

Quien acepta tu hermosura,

tus valores, tus sentimientos.

 

Quien acepta el reto

de amarte y cuidarte

quien aliviará y sacará

de tu corazón, los malos momentos

 

Quien confiado camina, ¡confiado!

y sobre tus pasos me muevo

con espada en mano

lucho por ti con deseos

defenderé este amor que me atrae

y lo llevo puesto, te brindo el mío

como armadura en el tiempo.

 

Soy tu ángel, el de tus sueños

el que hará batallas

por defender lo nuestro

aquí en la tierra y en el firmamento.

 

Mis alas plateadas

he cambiado en un momento

para amarte como humano,

en un bello encuentro.

 

Eres mi musa,

mi quejido en el viento

yo he llegado justo,

justo en el tiempo.

Justo en el momento

para brindarte este amor

porque eres parte de mi complemento.

 

Para compartir contigo mi universo

donde la paz y el amor viven en paralelo

donde no necesitare las alas para cubrir tu cuerpo.

Tengo tanto amor, tantos deseos,

que mis besos ansían tu boca

y tu mundo interno.