John morales

Para tu alma

Amor mío, la noche está de faldas

y, bordones por los escapularios,

arde la buena nueva rojos labios,

la noche se solaza trinos gualdas.

 

¡Oh! diáfana mujer en la alborada,

¡tú, la unidad de la naturaleza!

nunca hubo por las albas tal belleza!

ni hespéride que fuese tan amada.

 

Un Para Siempre que infinito espera,

luz, vida horizontal que en viernes santo

clavos ardientes ha crucificado;

 

dormiré por tus ojos ¡sí! ¿quién fuera?

¡yo! la Esfinge azulina de quebranto

¡clama arenas, herida en su costado!

 

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David John Morales Arriola.