Con las esperanzas de redimirse cae rendido a sus pies, pero sin darse cuenta que es tarde esta vez.
Nunca hubiese imaginado que a la mujer que amo,la pudiera lastimar tanto, maldito efecto del alcohol, doloroso adiós.
Se toma la cabeza, pero sus manos en sangre reflejan un acto violento, lágrimas caídas sobre las mejillas de ella la dejan pérdida en un oscuro eterno.
Ahora lo puede ver, las marcas de su piel reflejan todo el daño que hizo en su ser.
La toma entre sus brazos sin respuesta,cobarde sin corazón asesino de una hija, asesino de una madre, asesino de un amor, preso de su error.