Hoy, aquí, ahora no, tal vez mañana,
el mundo habrá pintado una explosión
que retumbe repicando el mismo son
y al dardo increpe que le dio en la diana.
Quizás el orbe un día caiga al vacio
donde tiente a la muerte sin remedio,
sus tripas despanzurren por el medio
y reclamen clemencia al desvarío.
Quizás un día venga otro sin licencia
que se apiade y que al nuestro lo fecunde
y nazcan otros más que al nuestro inunde
hasta llenar su vientre de decencia.
Quizás llegue un día y yo me vuelva loco
y mi mente ofuscada otro pariera,
haciendo de la vida primavera
y al tiempo retrasando poco a poco.
Quizás, siempre quizás, yo presintiera
que el planeta no es más que una falacia;
esto lo pienso bien y me hace gracia,
pues realmente es lo que es y no quisiera.
©donaciano bueno