Llego, me siento; mis ojos cierro,
Dejo que fluya luz por mi cuerpo;
Es un descanso dejar salir
Vanas presiones del convivir;
Es un instante, breve momento,
En que desechas todo lo yerto,
En que te escondes sin más presión
Y olvidas todo sin restricción;
No piensas, vives con entusiasmo
En ese oasis, bello remanso,
Dejas la lucha de lo que fue
Entre la dicha de este placer;
Es el silencio, es la grandeza,
Ese dulce eco, esa belleza
Nada te importa, todos es salud
Nunca estás solo, van Él y tú…