Uno vive narrándose
entre el ayer y el hoy
los intereses, amores,
provechos y desventajas
Éxitos e inutilidad
poder e impotencia
del ser y no ser
Uno piensa, imagina,
maquina, enmascara
con poder y pasión
Pasión narcista
donde se ensueña
y se adueña
Y se es
pura especulación
y del más absoluto cálculo
Saber y poder
se enraizan,
se enlazan
se conjugan
se ensalzan
en ese saber no sabido
y la risa estalla
en el centro de la mirada
en la redondez de la letra
en el vacío del espejo
con el temor permanente
de quedar en la intemperie
de la propia desaparición
de la pérdida de si mismo
y el peligro
de volver al caos
A esa angustia
que habita el yo
A ese nudo
A ese fantasma
que nos despedaza
donde uno cede
Cede la palabra
al sueño
al acto
al aceptar
un otro que no es yo.
Mané Castro Videla