PENUMBRAS
En penumbras
mirar las noches y vestirlas de sombras que pasan y otras duermen...
en penumbras
la tuya y la mía, por un rincón de un cuartucho
nos despedimos de la luna que bordea en la ventana,
cálida y muda...
que fiel indecente al rozarte la mano
como tiemblan las figuras que te adornan
rememorando el pasado nocturno,
con ansias...
y las sombras
alargándose al vaivén de viva y sentida voz
y nuestra luna
que sigilante nos vigila...
Es mi dicha
espesura infinita que al olvido me ligo,
más como quisiera retenerte en las estepas solitarias
arrebatarte del sufrimiento presente
y hacerte historia en mi vida
y hacerte la musa de mi alma,
y forjar del relato sutil encanto de amor
que se rodea de oscuridad y silencio
de murmuradores que lastiman el sentimiento...
Estarás por siempre
con mi mano sobre la tuya,
por el deseo de las almas que se juntan
en noches de alivios y de perpetua felicidad,
con la luna alumbrando tu rostro
y a tu corazón que abstrae mi realidad...
pienso y callo...
aquel tiempo pasado primaveral...
hoy el mío por siempre invierno
con la luna siempre oculta
y el sonido
de la tempestad
busque y no estabas en el aire,
tu silueta, tu voz y tus caras miradas,
en la inmensidad de esté océano...
naufragan ausentes de mi alcance,
presentimiento de retenerte, presentimiento de lejanía,
presentimiento de nada...
la barca está sola,
mi alma navega sola,
se quedará sola sin la musa inspiradora...
y tu alma volátil y esquiva,
ausente y difusa, de ensueños y cantos perdidos en estos mares,
un por siempre adiós resentido,
un por siempre adiós reprimido,
un por siempre adiós se ha consumido...¡Es mi adiós más sentido!
Es el adiós de tus letras negras y corrosivas
como las penumbras agitadas en la soledad!