Hace frío en todas las regiones corporales.
Las paredes respiran o susurran inviernos en mis otoños.
Una tristeza sin piernas. Una alegría con patas.
Así paso mis otoños, en una cama nublada, pronta a llorar
Para la vegetación de mi desierto florido.
Así paso mis inviernos, en mis otoños, pronto a llorar
Para la vegetación de mi corazón florido.
Pasó una podadora de caricias por mi cama
En el más crudo invierno del clima,
En el más tierno invierno de mí.
Así pasas sin detenerte, podada por las distancias.
Pasó un revolver de hojas por mi cama
En el más crudo otoño del clima,
En el más creativo otoño de mí, sin ti.
Así pasas sin tocar el suelo, empujada por las corrientes del viento.
Así paso las estaciones, combinándolas, saltándolas, intercalándolas
Para que en tu regreso veas a esta persona gélida de extrañarte
Y con las hojas tocando el piso como los poemas secos de vos.
Así mismo me acurruco en mi cama podada de caricias
Pensando un verano de mañana
En un abrazo de mi cama primaveral.
Que no pasen los años ni el tiempo prematuro
Que pasen mis caricias por tu piel
Que pasen mis besos por todo de ti
Que pasen las estaciones en mi cuerpo
Que pasen los te extrañé y no los te amé.