Juan Senda

((((((((((EL SUEÑO))))))))))

EL SUEÑO

 

Dime tu querido sueño,

¿por qué tengo que soñar

las cosas que yo no quiero?

 

Yo sé que vives en mi

y en tu poder me sujeto,

a que me muestres caminos

caminos que no deseo.

 

 

Hay otro sueño que es lira

lirismo del sentimiento,

que te devora dormido

y te devora despierto.

 

 

 

Y nada tienes que hacer

con las cosas del deseo,

mas  no queriendo querer

sacias el hambre del cuerpo.

 

 

Si las quimeras son brisas

y los sueños son los vientos,

dejadme soñar despierto

todos los sueños que pienso.

 

 

 

¿Por qué me acercas las sombras

y me separas los cielos?

 

 

¿Y por qué yo he de beber

ciertos vinos que no bebo?

 

 

Tu me brindas verde valles,

y de flores los senderos

y de espumas los caminos,

y de amores mis consuelos.

 

 

 

Otras veces me trasladas

a las fosas del infierno,

a ver los ríos de sangre

y el gran aspecto dantesco.

 

 

 

A veces sueñas con cosas

que no tienen fundamento

y pierdes aquel eslavón

y enlazas con otro sueño.

 

 

Cuando yo vivo soñando

nunca sé si estoy durmiendo

o totalmente dormido,

pero siendo la memoria

quien le pregunta al cerebro:

¿Cuantos sueños he soñado

y cual ha sido el primero?

 

 

Unos los recuerdas antes,

otros los recuerdas luego,

y vas pensando y pensando

y te aparecen más sueños

algunos los ves sociables,

mas otros los ves grotescos,

y como sigas pensando

te aparecerán más sueños,

uno que no recordabas

quien sabe ya cuanto tiempo,

y piensas por qué soñaste

y que algo viene a cuento,

de aquel personaje culto

o de aquel personaje necio.

 

 

A veces pienso después 

 otros un poco más serios

cuando sentado y despierto,

siempre te vas con tus musas

en la  barca del cerebro.