Puede que nunca sepas la razón de este poema
pues tu corazón de piedra no alberga sentimientos
pues vas sembrando de pena a todo el que te adora
pues después de amarlo dejas que se lo lleve el viento
Aunque pienses que tu no tienes llanto
porque nunca tu corazón ha sido herido
algún día a tus noches llegará el espanto
cuando sepas que tu también has querido
Querrás regresar atrás, a aquel pasado
en que con todos los hombres jugabas
más de tu alma se escapará un gemido
al darte cuenta de que has sido burlada
Entonces te darás cuenta vida mía
que quien juega con fuego se quema
pues tuviste el corazón de una arpía
y ahora abandonada por todos lloras