Espero verte antes que termine el ocaso para soñarte con la suave luna,
sin pensar en el olvido y tener que desprenderme esos recuerdos;
Que frecuentaron en nuestras vidas para solo valorar tu amor
en un tiempo que va y viene hacía la perspicacia del silencio.
Inmortalizo aquellos momentos que pasamos juntos abrigados de armonía,
Al paso de nuestro pasajes diarios en aquella plaza de concha acústica.
Las palmas de nuestras manos oscilaban serenamente antes la suave brisa
de sensaciones frescas nutriéndote esa mirada tierna de bella mujer .
Observo tu rostro sonrojado en medio de alegrías dulces; Beso el reflejo
de unos labios rojos que me convencen de continuar caminando
contigo en esperanzas infinitas, y de alcanzar la cima de la felicidad
oscilando en todo momento nuestras manos atadas en forma de corazón.
La elegancia de tus suaves desplazamientos contamina más mi amor,
no dejándome separar de ti entre el bullicio de las aves del cielo;
Por lo tanto sigo contigo entre risas alegres,
pero nuestras manos oscilan en todo momento atadas en forma de corazón.
RIVAS JOSE