marioranero

Contemplativo…

Me siento a contemplar y observo

infinidad de caras y morisquetas

que reflejan el ánimo de un pueblo

que no sabe el final de esta historieta.

 

Salen al cruce almas intangibles

que reniegan de verdades obsoletas,

vienen a mí ilusiones absurdas

que otrora trascendieran las estrellas.

 

Contemplar… contemplarme… contemplarte…

signos ignominiosos de un poeta,

relación entre la imagen y un designio,

 

evolución sometida y aún perversa

a la que no escaparía la figura,

de un alma en desalojo y manifiesta.

 

Mario Ranero