Estuve lejos, pero, al fin llegue,
Presione suave tus pies con mis besos,
Acaricie cada escondite de tu cuerpo,
Y estabas allí profunda y dormida.
Tu cabello entrelazado en mis dedos,
Tu clítoris imantado con mi lengua,
Tus labios vaginales se unían con mi boca
Y tus senos erizados de pasión
Disimulaban una caricia.
Y estabas allí profunda y dormida.
Seguí explorando tu figura,
Me detuve en una axila y lamí,
Hice suaves roces en tu cuello,
¡De pronto!
Un movimiento,
Y quedaste con la mirada aprisionada en el colchón.
Y estabas allí profunda y dormida.
Comencé a besar tu espalda despacito,
Deslizando mi lengua entre tus glúteos,
Una vez y otra vez, hasta excitar tu vagina.
Y estabas allí profunda y dormida
Te acaricie toda,
Te bese eternamente
Y me dispuse a entrar en ti,
Mi pene erecto,
Se perdía en la profundidad de tu vagina;
Y despertaste entre mis brazos,
Ansiosa y desesperada,
Tu cuerpo sudado resbalaba entre mis manos,
Tus gemidos alborotaban mis sentidos
Y alcanzamos el orgasmo inmaculado;
Y desperté, solo era un sueño.
Y estabas allí profunda y dormida…