En una noche me visitaste descubriendo mi corazón, ¿fue por placer? ¿Fue por amor? Eso sólo lo sabes vos.
Tantas cosas en común y tantas en contra que al final lo único que importa es compartir esta pasión. Nunca dejes de soñar mi dulce amor.
Deja que el tiempo se encargue y termine de formarte, no pierdas esa inocencia e ingenuidad en estos días tan difícil de encontrar.
En mí siempre tendrás un amigo fiel, un hombro para llorar y unos brazos para darte calor en esos momentos de frío.