Ese frio que viene de adentro de un político,
es más peligroso que el de Alaska o el de Siberia,
porque empezando por lo de un psíquico
vienen de la demagogia el sectarismo y la miseria
de la incompetencia y la corrupción al final
son los males que afectan en mayor o menor medida
a toda la clase política por igual
de una humanidad adormecida.
La sociedad necesita de gobierno
líderes que guíen el pueblo
de gente que venda su alma para el infierno
eso se hace en elecciones con cuerdos.
Ellos en ejercicio después de tomar el poder
se olvidan que también fueron gente
e igual que perro cobarde pueden morder
en elecciones participan activamente.
Por designación o nombramiento,
son personas que llegan al poder
a través de una revolución sin bases ni cimiento
en golpe de estado o así por joder
con fraude electoral llevan a los políticos
a ser personas peores pero con poder
con grandes sumas y propiedades de ricos.
Entonces se destapa ese frio desde adentro
imposible de frenar
lejos de ser perfecto en poco tiempo
solo son un sueño del que no quieren despertar.
La perfección es la medida de sus promesas,
sus mentiras tienen que ser creíbles algo verdaderas
es como un abogado que tiene palabras funestas
licencia para robar de muchas maneras.
Un político de primera debe velar
por el interés general de los ciudadanos
y mantenerse íntegro y entregar
una ética profesional en la que confiamos.
De servicio al pueblo y no hacia sí mismo
Sin corrupción para lo que fue confiado
con menos demagogia y sin sectarismo
solo así será un político apreciado.