piotr antonin

SUAVE

El nocturno de Dvorak embriaga plenamente el aire

con un despliegue de melancolía infinita

y los sentidos revelan su naturaleza verídica

añoranzas elegidas del catálogo del tiempo

 

La soledad marmórea ha dejado una hendidura ínfima

y en ese intersticio te has deslizado imperceptible

para poblarme total, sin que lo adviertas

 

Dulce mujer, presencia inquietante, desnudas mi alma expuesta

suave, como un susurro ondulando un espeso silencio

dejas caer tu voz como partículas ingrávidas

y no atino a hacer otra cosa más que amarte

 

Pero ni te inquietes ni temas

quizás todo sea un espejismo inusitado

y en el devenir del tiempo

solo verás mi sonrisa, petrificada e inocente

que te acariciará por siempre