Salgo al jardín, miro al cielo
y veo la luna y las estrellas,
inevitablemente en ti pienso
y es tu rostro el que veo en ellas.
El frío de la noche, entumece mi rostro
y busco algo de calor en tu recuerdo,
que es la llama que ilumina mi sendero,
aún más cuando no estas a mi lado.
Se que algunas veces he fallado,
sin embargo, quiero estar a tu lado,
y poder caminar juntos de la mano.
Quisiera decirte en estos versos,
todas las veces que te he soñado,
y como en mi corazón has entrado.