He sufrido, he llorado, me he sentido solo
Pero tú Señor siempre estuviste ahí
He querido dejar todo a un lado y rendirme
Pero cuando no sentía fuerzas para seguir
Me dabas de tu abrazo y me decías: tú puedes
Confía porque yo estoy contigo aquí
Y hoy sé que aunque vengan tropiezos y pruebas
Tú me ayudarás y me guiarás hasta el fin
No me imagino que sería mi vida sin ti
Sería como tierra que se la lleva el viento
Sería como ciego caminando sin rumbo
Y no podría si quiera arrastrándome poder seguir
Tú eres mi todo, Señor. Nada sería sin ti ni nada tendría...