En mis cumbres canarias,
quiero un día reposar,
bajo la sombra del Nublo,
rodeada de un pinar.
Humedecida la tierra,
por los alisios isleños,
que esparcen al aire,
olor a romero.
Vuela mi alma isleña,
dejando atrás mi cuerpo,
en las altas crestas,
que tocan el cielo.