La mirada que me regalan tus ojos
bastará para sanar mis sombras
en esta vida que me nombra
muda y pálida en mis despojos.
Esos, tus ojos de dulce mirada
llenan de murmullos y música de alas
las tristezas que florecen y me embargan
en esta senda que camino emocionada.
Mas, tus ojos de mirada dulce y cálida
cual noche tibia e iluminada,
dirán que tu amor me tiene esperanzada
pues sellan el temor de tantas lágrimas.
Por eso quiero despertar cada mañana
en el espejo de tus ojos y besarte
como si fuera primavera que te canta
y acaricia con estrellas tus entrañas.