despierto fatigado de un viaje
por ignotos mares
cargados de infinitas nubes
las cuales lloran lentamente
gotas de olvido
respiro exhausto la brisa
aun tengo en mi rostro
la ultima sonrisa que marco con indeleble tinta
un niño de la calle con su cara mustia
y su mirada de sol
recuerdo que transito esta selva
y me pregunto en voz baja donde me lleva
este viaje sin norte
en esta tierra inospita
donde los seres pululan y trafican