Cuando despierto en la noche plena
Puedo ver al cielo un cielo claro,
Puedo ver, como en el agua azucenas,
Nubes perdiéndose en lo estrellado.
Y la luna que se pierde en horizonte;
Y los astros inquietos de sobriedad,
Son como luciérnagas en el monte
Alumbrando una triste oscuridad.
El ruiseñor que canta de mañana
Ha callado su maravilloso cantar,
Acobijado en una hermosa mariana,
A la luna, ahora ha de admirar.
Y la golondrina azul ha dejado su nido,
Para ver de la luna el despertar;
Y las hadas del bosque han huido
A ver quién del cielo pueden amar.
Y… no. ¡Oh mi Dios! ¡Oh Dios mío!
Por favor dígame ¿cómo he de vivir?
Si mi alma de mi cuerpo se ha ido
Y mi espirito en mi no quiere seguir.
Mi vida se opaca tristemente
Igual que la luna al ocultarse,
Mas no se vivir más sobriamente;
Bohemia hace a mi corazón embriagarse.
Y el fantasma que me asusta de noche;
Y las voces calladas en el viento,
Hacen que mi vida se destroce
Y mi corazón quede sin aliento.
El miedo de caer en la melancolía
Hacen de mí vivir una muerte lenta,
Llena de nefastos horrores y una sombría
Vida que hace ver lo que aparenta.
Y se han perdido del cielo las estrellas
Que aguardaban de mí una razón,
Como las niñas de mis muy bellas
Ilusiones y mis secretos del corazón.
Que me perdonen todas las rosas
Que hubo siempre en mi jardín,
Por enamorarme de las hermosas
Ilusiones que ya han tenido fin.
Cuando despierto en la noche oscura
Puedo ver la tristeza de mi vida;
También a una dulce pura
Que se esconde a la luz del día.
Y el vuelo de las almas en el cielo
Guiadas por la luz de un farol;
Y las góndolas en los ríos. Helo:
Navegando con parejas sin amor.
Las invisibles góndolas del cielo
Que flotan huyendo hacia el mar
Son quienes han podido perder lo
Que en mi vida siempre quise amar.
Y la ilusión de tener una luna bella
Ha sido el motivo de perder la razón;
Y aún aguardan todas las estrellas
Todos los secretos de mi corazón.
Ricardo Manzanarez (Nicaragüense)