A. Martinez

Musa blanca

Tus manos vienen siempre a acariciar mi sueño

llegas soplas en mi frente tu aire de caricias

y te vuelves a marchar adonde te cobija un cielo

donde eres carne sola que pide a gritos mis manos

 

Tus pies de plumas te elevan sobre mi garganta

que inventa palabras nuevas y dice tu nombre

un nombre de matices diferentes a mis oídos sedientos

con mis ojos que te llaman para que aparezcas

 

En el ruido de la noche siempre te veo llegar

piel de uvas vestida de colores alboreados

labios sanos y de cálido aliento que desciende

sobre mi pelo para estampar en ellos  palabras

 

Musa blanca acrisolada por relámpagos

con tu fina lluvia que refresca mis mañanas

trayendo en el cuenco de tus manos flores

de la tierra donde se tejen los anhelos más dorados

 

Una de estas noches he de conquistar tu niebla

el día se acerca de tu última visita de reposos

cada día estas más a mi lado y no te marchas

sé que ya ansías fundirte en mi como te pienso