Cuando beso tu boca,
embriago mis sentidos...
Me pierdo en sus néctares divinos
que dejan en mis labios,
Exóticos Sabores de esencias
y frutos prohibidos.
Cuando observo tus ojos
tan profundos,
Que me miran perdiéndose
en los míos…
Recorro el firmamento
en un segundo
A través de la belleza
de su brillo.
Cuando hablas ,
tu cadencia es un murmullo
Que acaricia mis oídos
con su ritmo,
Me envuelven como olas
que en la playa
Van dejando los rumores
de un Suspiro.
Me pierdo en el embrujo
de tu cuerpo
Que emana su perfume
inconfundible,
De azucenas, de rosas y de lirios
que me dejan de su
aroma poseído.
y siento tu piel cuando
se crispa…
y tu sexo fundiéndose
en el mío…
y viajamos los dos
al infinito
en el rito del amor
y el paroxismo.