Un mes ha terminado y otro llega
para agrandarme a mi la oscura estancia,
unos trescientos grados en la rueda,
sesenta grados más en la vagancia,
a otros tantos de esfuerzos y constancia
y a llenarlos de sueños si algo queda.
Y otro ha de pasar y nunca será igual,
quizás sea más estrecho, más angosto
y otra lluvia y a que amaine el temporal,
calor a soportar el mes de agosto
y repetir otro año haciendo el mosto.
para camino correr al carnaval.
Y esas ansias de pequeño por crecer
y el dolor de mayor si éste decrece,
la obsesión por disfrutar y parecer
cuando el alma de dolor ves que fenece,
la glándula cardiaca se entristece
al ver hojas de los árboles caer.
Mientras la vida fluye el tiempo huye
birlando a la verdad el pensamiento
de que todo al final siempre confluye,
trucando la memoria de este invento
en un inmenso y terminable cuento
hasta que el viento pasa y ya te excluye.
©donaciano bueno