Era alto, pelo rubio
último modelo
dos hermosos espejuelos
donde su cuerpo retrataba,
en una esquina paraba
de la plaza a lucirse
No quería fundirse
sin demostrar su textura
era de raza pura.
Capot de fina cabritilla
una cómoda silla,
para sentar y manejarse
orgulloso se mostraba
en la plaza por la tarde.
La vida teje oportunidades,
una carcacha vieja
por esa via transitaba
y...lo desafió a un entrevero
cual llega primero
al éxtasis recorrido.
Para mi sos pan comido
resaltó imprudente
se consideraba potente,
en velocidad arrancada
sin saber que atravesada
la carcacha se ponía.
El golpe fue fenomenal
y ese exquisito animal
ha quedado tirado.
Fatiga de material,
rodamientos agripados,
pintura arrugada
y los focos apagados.
Los años ya consumidos
de la pequeña materia
teniendo cualquier historia
un rayón mas no tenía
problemas su carrocería,
eran gajes de la vida