¿Qué te cocino, amor, en este día?
¿Estrellas al ajillo con limones?
¿Rebanadas de lunas en ostiones
o trozos de mi cuerpo a las sandías?
¿Tal vez, un corazón en revoltillo
o un verso con cebollas y tomates?
¿Qué te parece un alma en chocolate
o un beso de ternura y picadillo?
Quizás, una luciérnaga escalfada
en la esperanza tibia de tu imagen
Mejor, te frío peces adorables
que nadan jubilosos en mi almohada.
Y cuando todas las recetas cuajen,
agregaré sazones inefables.