Yo… no escogí el camino que con afán escogiste,
que te pareció el mejor, ese, que para ti está bien;
de vida libertina, loca y promiscua en sexo al cien.
Tu… sabes por donde caminas… sabes por donde te fuiste.
Yo… no soy el que ha re marcado aquel vestigio
que va influyendo en que el precio de uno descienda
en picada vertical sin importarle ser prenda.
Tu… con tus actos has enterrado tu prestigio.
Yo… no soy ni seré quien el timón va a dirigirte
porque no quiero amanecer en una curva volcado,
en deceso o grave por haberme involucrado.
Tu… sabrás si es temprano o tarde para corregirte.
Yo… voy y vivo sereno pues en mi ruta llegaré muy lejos,
me siento en camino amplio, de promisorio futuro;
en la decencia digna de vivir tranquilo y seguro.
Tu… reconocerás quien es quien si es que llegamos a viejos.
Yo… de haberte conocido, hoy, quizás algo me quejo
y también tal vez no, porque en mi existencia
aprendí de entre tu y yo cuanto hay de diferencia.
Tu… también lo sabrás… siempre que veas el espejo…
A.Maestre