La esperanza de mi vida
me la arrebató la muerte.
Porque en mi vientre sentía,
que su vida era mi vida,
y su corazón y el mío ,
a un mismo compás latían.
Por eso sufro esta pena
y es mi dolor y lamento.
Por eso lloro sin lágrimas,
mis lágrimas no nacieron.
¿Dónde estás pequeña mía?
¿A qué lugar fuiste a nacer?
¿Acaso no era tu madre?
¿O es que no te merecía?