Khudaniel

Oscuro

Cada rincón oscuro frecuentado es hoy más oscuro al volver la vista

lánguido tintineo de cascos muertos y secas lágrimas de sabia cristalina

un chillido tímido de piedra que choca con otra piedra en mitad de la noche

desnudo y con cadenas atadas a su pecho maltratado, abierto de costilla a costilla

hueco, mas que hueco vacuo, con un manojo de espectros

que susurran blasfemias con lengua de cardo

lamen y lamen sus oídos lujuriosamente cautos

pastan a la sombra del ardor que quema con falso recato

todo afán inútil, inútil no desplomarse ante su encanto

quisiera hundir un puñal en ese pecho con arrebato

sembrar esta semilla de metal y que florezca sangre fría al primer tajo

o tibios pétalos de fuego rojo que se sequen con el viento al tacto

pero esa voz acaricio las mil leguas en que se dispersó el abrazo

fue el rocío de aves muertas renacidas del verde llanto

la copa rebozada de dicha, tan falsa como el amor es falso

caído en tan celestial desgracia que enmudece labio contra labio

maldice su desconcierto se hace gota de sangre surcando libre el espacio

D. Erazo