Te quiero y te odio, Mujer,
Porque a veces te siento mía,
Sin que hayas aun llegado a serlo.
Te quiero y te odio, Mujer,
Porque a veces creo merecer tu amor y tus caricias,
Y no es así.
Te quiero y te odio, Mujer,
Porque siento que deseas mis labios en los tuyos,
Y mis manos en tu piel,
Pero no lo dices.
Te quiero y te odio, Mujer,
Porque alucino cada día con que te arriesgarás a saltar al vacío de mi mano,
Y no lo haces.
Como lo dijo Sabines, Mujer,
\"Todos los días te quiero y te odio irremediablemente\".