El viento danza lentamente.
Son olas de suspiros.
Y estoy perdido. En el amanecer, veo como te beso, y como existes, entre el tiempo, y la agonía,
de tus ojos. Nose vivir sino es contingo, estoy, entre tu mirada, y la noche, entre el día, y la vida.
Y llega la calma, como un ruiseñor posado en el cielo, translúcido es el canto delas gaviotas.
Tus ojos son los que vuelan, y tu mirada la que se posa.
Habraza me, como abrazarías el mar.