Tan estúpida, tan cruel conmigo misma
tan ilusa y tan sentimental
esa soy yo;
la que aún cree que la quieres
la que aún te espera en el mismo lugar de siempre,
la que piensa que sigue teniendo un espacio en tí como tú un espacio en ella
Es hora de marcharse,
las agujas del reloj encajan y es hora de dejar el vacio de tu amor
no eres mío, nunca lo fuiste, nunca lo serás
Es hora de tomar lo poco que queda y dejar tu lugar vacio.
Tan efímera es la forma que creo que todo es para mí
cuando ya ni tu voz, ni tu aroma, ni tu cariño,
ni tus poemas, ni tus palabras son mías.
A veces tan simple, a veces tan amable
a veces todo un incontrolable eso e s lo que tú eres
pero ya es hora, hora de marcharse.
Esta situación me mata y me envenena
lo único que espero es que jamás vuelvas.