Recuerdo con amor a mi poeta -Mi siempre AMOR-
Sentada en el regazo del olvido
bebiendo las penas que no olvido,
dejando ir el AMOR, ya ido.
Entre barcos de papel
mis anclas eché,
Más el cielo lo requería
Y muy sola me quedé.
Su poesía era para mí,
La mía, era para él.
En ellas de amor hablamos,
ahora cuando la leo,
lágrimas brotan de mi alma.
No me puedo contener,
su amor recuerdo con llanto.
su poesía, es mi canto
mi dicha, y mi existir.
Sentada en el balcón
no hay un día, que no lo recuerde.
no hay pena que no me causé
saber que se fue para siempre.
Sus besos borrará el tiempo.
La huella de su cuerpo
se desvanece en mi lecho.
cuánto lloro éste amor
que se coló en mis huesos.
Quisiera ser su tumba
que su cuerpo en mi descansé,
Y su voz en mí se apagué
cómo se apagó su canto,
con el que alegría me daba.
La madrugada de su adiós
no cantó el gallo,
no salió el sol y, yo que lo quise tanto
no me despedí de él,
de un beso en la boca
mi amado se fue sin él.
Mil besos te hubiera dado
al despertar el día,
si yo en tu cama hubiera despertado,
no hubieras muerto -solo- de AMOR.
Alicia Pérez Hernández
-No es la pluma la que escribe, es el alma-
Todos los derechos reservados©
Estoy en ti Alicia mía
Te pienso...
En ti yo existo.
Oigo el tic-tac:
latir enamorado.
Voy a tus adentros
-mi brazo por encima
de tus hombros-.
Oigo suspiros:
aguas de tu río interior
manando...
Leo tus pensamientos:
brincos del corazón
que me ama...
Duermo en tus sueños:
romanticismo lírico
bajo la acacia
besándonos...
amor en rosas de pasión.
Se abren tus labios:
se entran mis besos.
Paseamos: luna y estrellas
brillan el sendero...
Somos dos en uno: hemos
deshojado el amor de la pureza,
el amor del pecado,
entre los girasoles del verano
-estoy dentro de ti,
y te amo, vida de mi vida eres,
sorbiendo el zumo de tus besos-
sin reserva… dulce Ali.
(Has entrado en mi vida
como un torbellino enamorado...)
-Salvador 16-10-11- Granada-