Te quiero.
Te quiero al amanecer,
en el transcurso del día,
incluso al momento de dormir; cuando mis sentidos se apagan y en lo profundo de mi ser pienso en ti.
Te quiero con tus conflictos, problemas
y defectos.
Te quiero hoy,
mañana
e incluso cuando tu corazón deje de resguardarme,
te querré.
Te quiero de una forma inexplicable.
Es un sentimiento irreparable,
E incluso insuficiente.
Te querré siempre, de forma honesta.
De forma simple y a la vez implacable.
De forma tierna y si, en ocasiones mientras estoy encerrado en un burbuja de enojos, te estaré queriendo.
Te quiero por enseñarme a navegar en este mundo que no entiendo.
Por demostrarme lo que es el querer sin recibir el mismo afecto.
Te quiero por coincidencia,
Por equivocación por necesidad,
Por ti, que eres real.
Por mi.
Porque mi afecto a ti no es ambiguo.
Incluso cuando piensas que no te quiero, te quiero aún más.
Cuando crees que no hay salida, me aferro a quererte.
Cuando sientes que te quiero demasiado, me acoplo a tu comodidad.
Te quiero como muchos han dicho quererte, pero me mantengo queriéndote como muy pocos han demostrado hacerlo.
Podría justificarme,
Podría improvisar quererte.
Entender este cariño que surgió de la nada.
Te quiere un hombre que no piensa porque:
Simplemente te quiero como yo mismo se quererte.