Semilla interior
Podía estar horas viendo al árbol
sin saber que el observado era él,
lo encontraba rígido como al mármol
de alma pura blanquecina cual papel.
Encontraba, también, parte de \"ella\"
volviendo a trastabillar con la ilusión,
de que es necesario algo de afuera
para sentir el complemento interior.
Fugaces sucedían los días,
cuando buscaba lo inencontrable,
pasar horas viendo al sauce podía,
así su quietud yacía estable.
Mas su calma era perecedera,
él sentía que algo tenía que hacer,
que no era por azar que en esta era
ni lugar, le hubiese tocado nacer.
Y así fue entonces cuando aquel floreció,
conectando con la sincronía,
también con el poder de la vibración,
recordó así su sabiduría.
Salió de una vez a pisar tierra,
donde la semilla puede florecer,
lejos de todo lo que la encierra,
pudo al fin a si mismo reconocer.
creación propia- \"KaNaK\"