Te espero como siempre en aquel rincón especial muy atónito
como envilecido mirando al viento alborotar tus cabellos largos,
para solo empezar a pugnar tus dulces besos en el infinito nido
de nuestras corazonadas traviesas de pasión y amor…
Al viento le haz gritado con la furia de tus instinto modestos
para solo escuchar el eco ¡ Infinito son nuestros besos al son del viento !
te amo sin perder nunca la razón y reafirmo los múltiples
manojos de besos entre caricias tiernas notadas con ardor infinito…
Recibo tus afectos dorados entre risas alegres que cubren
lindas pinceladas hechas entre nosotros dos al compás del amor,
risas sutiles entre esa pasión desbordada en el comienzo de
nuestras vidas libres en medio de un mundo de amor infinito…
RIVAS JOSE