alejandro guardiola

DORMIDO A LA SOMBRA

Dormido a la sombra del árbol del olvido

su barba desatada en blanco armiño

está allí quieto sin hacer ningún ruido

un anciano que alguna vez fue niño

 

Su envejecida frente de pesar se abrasa

en sus pasos cansados ya no nacen espigas

en su cabeza ya se pintan hebras de plata

llora sin esperanza con su alma vencida

 

Sufre y calla sofocando de sus huesos el gemir

su cantar se ha perdido en el ayer de los tiempos

una tarde desolada vió al cielo a su esposa partir

ahora siempre camina solo adonde le lleva el viento 

 

Apenas se apresura pues su caminar le cuesta

en completo desamparo sin nadie que le acoja

en las noches en cualquier rincón se acuesta

y si las nubes arrastran tormenta él se moja